Suzuki ha insinuado recientemente la posibilidad de regresar a MotoGP en el futuro. Sin embargo, el presidente de la compañía, Toshihiro Suzuki, ha dejado claro que ese regreso depende de que primero se construyan unos cimientos sólidos dentro de la empresa.

La salida de Suzuki de MotoGP a finales de 2022 fue polémica, ya que incumplía un acuerdo de cuatro años con Dorna, promotor de la serie. A pesar de la salida, Suzuki se fue con una nota alta. La marca se proclamó campeona en 2020 con Joan Mir y cerró su última temporada con una victoria en Valencia.

Ahora, poco más de dos años después de separarse de MotoGP, Toshihiro Suzuki ha reavivado las esperanzas de volver a la categoría reina. Sin embargo, ha enfatizado que el objetivo inmediato de Suzuki es mejorar su gama de motos de carretera para satisfacer a los entusiastas del motociclismo moderno.

"Las victorias en MotoGP fueron obviamente muy importantes para nosotros," explicó Suzuki a Corriere dello Sport. "Pero no nos sirve de nada si no tenemos una gama completa y variada de modelos para todos los entusiastas del motociclismo. Ahora mismo, no creo que estemos en esa situación. Es crucial que desarrollemos rápidamente una gama que satisfaga a los motoristas de hoy. Si lo conseguimos, entonces podremos pensar en competir—y ganar—de nuevo."

La cautela de Suzuki llega en un momento en el que otros actores de MotoGP afrontan sus propios retos. KTM, a pesar de reafirmar su compromiso con el campeonato, ha estado luchando con problemas de financiación, obligando a una pausa en el desarrollo de su moto. Mientras tanto, Dorna ha tenido dificultades para atraer a nuevos fabricantes a la parrilla, sin nuevas incorporaciones desde la salida de Suzuki.

Si Suzuki vuelve a MotoGP, se enfrentará a importantes retos. La compañía tendría que reconstruir su programa de MotoGP desde cero, y los rumores sugieren que podría haber vendido datos clave de sus anteriores esfuerzos de competición a BMW. Además, los próximos cambios en el reglamento de MotoGP en 2027 dejan un tiempo limitado para crear un paquete competitivo.

Otro reto sería el espacio en la parrilla. Dorna se mantiene firme en mantener una parrilla de 22 motos. Para que Suzuki se una, tendría que asociarse con un equipo satélite existente, como Pramac, Tech3, LCR, Gresini, o el equipo Trackhouse Racing, de reciente creación.

A pesar de estos retos, el renovado interés de Suzuki ofrece esperanzas a los aficionados de MotoGP deseosos de ver de nuevo en acción la decoración azul y plata. Aunque puede que el regreso no se produzca pronto, el legado y la determinación de Suzuki sugieren que, si las condiciones se alinean, la compañía podría volver a hacer olas en el mundo de MotoGP.