En un mundo de MotoGP, perseguir tu pasión significa alejarte de todo lo que has conocido, incluso si eso significa rechazar millones de dólares. Y eso es exactamente lo que hizo Marc Márquez cuando dejó Honda para unirse a Ducati.

Incluso cuando sabemos que este movimiento ha dado sus frutos. En 2025, Márquez está dominando y, tras cuatro pruebas de la temporada, está en lo más alto de la clasificación. Pero detrás de todo este éxito hay una historia de cambio y valentía.

Hace unos años, Márquez y Honda eran inseparables. Con ellos ganó sus seis títulos de MotoGP, convirtiéndose en uno de los pilotos más dominantes de la historia de este deporte. Y también tenía el contrato más grande de MotoGP, según los informes, por valor de más de 100 millones de dólares, y el apoyo a largo plazo de los principales patrocinadores como Red Bull y Repsol.

Pero en los últimos años, las cosas habían cambiado. La moto de Honda ya no era competitiva, y la carrera de Márquez se había visto interrumpida por las lesiones y las caídas. Y era el momento de cambiar, ya que no era feliz allí, a pesar de la lealtad y el dinero.

“Fue una decisión realmente difícil,” dijo Márquez a Motorsport. “Lo tenía todo en Honda — mis títulos, mi equipo, mis amigos. Más que el dinero, se trataba de dejar atrás a la gente que me ayudó a convertirme en quien soy”

Así que en su movimiento, Márquez se alejó no sólo de un contrato masivo, sino también de la gente y las asociaciones que había construido durante más de una década. Se separó de Honda, Red Bull y Repsol, pero antes de tomar la decisión, se sentó con ellos para mostrarles respeto.

“Todos me dijeron lo mismo,” recordó Márquez. “Estás aquí para competir. Tu carrera es corta. Haz que cuente””

Y antes de irse, tuvo una última cena con el equipo Honda en Barcelona — no para hablar de motos, sino para disfrutar de su último tiempo juntos. “Hablamos de la vida,” dijo. “Fue emotivo, pero me dio paz.”

En 2024, se unió al Gresini Racing, que resultó ser un cambio de juego para él. No sólo la moto le sentaba bien, sino que también empezó a disfrutar de las carreras de nuevo.

“Esa temporada me devolvió la sonrisa,” dijo. “Recordé por qué me enamoré de este deporte.”

Ahora, en 2025, ha dado un paso más y ha subido al equipo oficial Ducati, donde ya domina. Y su nuevo compañero de equipo, Francesco Bagnaia, ha estado luchando por alcanzarle.

Sin embargo, Márquez admitió que la decisión de dejar Honda todavía le duele en el corazón. Pero, por primera vez en mucho tiempo, se está divirtiendo de nuevo.

“Si hubiera seguido como hasta ahora, lo habría dejado,” dijo. “Pero sabía que aún tenía más que dar. Sólo necesitaba la moto adecuada, y el entorno adecuado.

Así que, aunque Honda ha mostrado signos de mejora, está claro que Márquez tomó la decisión correcta — no sólo por su carrera, sino por su felicidad.