Es domingo, 12 de diciembre de 2021, y todos los aficionados a la F1 están pegados frente al televisor y esperando a que comience el final de temporada. Dos pilotos, Max Verstappen y Lewis Hamilton, están completamente empatados a puntos y todo apunta a una emocionante batalla por el título de campeón del mundo en el circuito de Yas Marina, en Abu Dabi.

La carrera está a punto de comenzar y el ambiente no puede ser mejor, todo el mundo está tan tentado de averiguar, quién va a ganar el campeonato. El primer aspirante al título de campeón del mundo, Max Verstappen de Red Bull, saldrá desde la pole, después de una vuelta increíble en quali el día anterior. El segundo aspirante hambriento, Lewis Hamilton de Mercedes, comienza justo detrás de él, y se espera una batalla emocionante en la primera curva.

“¡Se apagan las luces y allá vamos!

Ambos coches irrumpen en la primera curva pero es Hamilton, quien le roba el liderato a Verstappen, tras salirse de la pista y adelantar al holandés en la curva 1. Verstappen informa inmediatamente de la maniobra a su ingeniero pero la decisión del comisario es clara: Hamilton no tiene que devolver la posición a Verstappen.

Estamos a menos de la mitad de la carrera sin ningún otro momento at-TV-screaming ya que Hamilton ha estado liderando la carrera con bastante comodidad. Sin embargo, después de que tanto él como Verstappen entren en boxes para montar neumáticos frescos, se enfrenta a su primer desafío: Sergio Pérez de Red Bull.

El compañero de equipo de Verstappen, todavía con neumáticos viejos ya que aún no ha entrado en boxes, mantiene el liderato quedándose fuera. A pesar de sus neumáticos gastados, el piloto mexicano realiza una impresionante actuación defensiva, manteniendo a raya a Hamilton durante casi dos vueltas y permitiendo a Verstappen recortar la diferencia en poco más de 1 segundo. Por ello se gana: “Checo es una leyenda,” del propio holandés.

En la vuelta 37 de la carrera, la carrera de Antonio Giovinazzi'Alfa Romeo termina abruptamente cuando un problema mecánico le obliga a retirarse. Se aparca a un lado de la pista, pero el director de carrera Michael Masi considera que no es seguro que los comisarios retiren el coche mientras otros siguen a toda velocidad. Como resultado, se despliega un coche de seguridad virtual que reduce la velocidad de todos los coches en un 40%.

Durante este periodo, Verstappen aprovecha para entrar en boxes a por neumáticos frescos, mientras que Hamilton se queda fuera. Con los coches moviéndose a un ritmo reducido, Verstappen solo pierde unos 14 segundos con Hamilton, en comparación con los 25 segundos habituales durante una parada en boxes estándar.

Ahora de vuelta a la pista, Verstappen se enfrenta a la difícil tarea de necesitar reducir la diferencia en torno a 0,8 segundos por vuelta para tener opciones de ganar la carrera.

A sólo cinco vueltas para el final, Hamilton parece encaminarse a una cómoda victoria, con una ventaja de 12 segundos.

Sin embargo, el momento clave de este Gran Premio llega cuando el piloto de Williams Nicholas Latifi se estrella contra el muro tras una batalla con Mick Schumacher de Haas. Este incidente desencadena un coche de seguridad completo, lo que lleva a Verstappen a entrar en boxes una vez más, esta vez optando por los neumáticos blandos más rápidos.

Hamilton, sin embargo, no puede entrar en boxes sin arriesgarse a que Verstappen le adelante. Sin saber si la carrera concluirá bajo el coche de seguridad, Mercedes lo considera demasiado arriesgado y le ordena a Hamilton que permanezca en pista.

Mientras Verstappen está en boxes, varios coches doblados cierran el hueco con Hamilton, colocándose entre él y Verstappen. De acuerdo con el reglamento del coche de seguridad, el director de carrera decide si estos coches doblados pueden adelantar al coche de seguridad para restablecer el orden correcto de carrera.

El director del equipo Mercedes, Toto Wolff, insta a que la carrera termine bajo el coche de seguridad, mientras que Christian Horner, director del equipo Red Bull, presiona para que los coches doblados se aparten, la única forma factible de que Verstappen tenga una oportunidad de competir con Hamilton por el título. Ambos jefes están básicamente gritando al director de carrera en este punto.

Y aquí llega la decisión justo antes de la última vuelta de la carrera. El director de carrera Michael Masi anuncia que 5 coches doblados, que están entre Hamilton y Verstappen, adelantarán al coche de seguridad, dejando a Verstappen justo detrás de Hamilton con una enorme ventaja de neumáticos frescos. Masi se gana por eso el conocido mensaje de radio de Wolff: “¡No, Michael, esto no está bien!”

Hamilton intenta defenderse pero sus posibilidades de éxito están casi a cero y es adelantado a mitad de la última vuelta. El siete veces campeón del mundo hace un último esfuerzo para recuperar el liderato, pero Verstappen se adelanta y cruza la línea de meta, asegurándose el título y dejando a todos boquiabiertos.

Mercedes intentó prácticamente todas las formas de protesta contra los resultados de la carrera pero nada tuvo éxito y el título a día de hoy sigue perteneciendo a Verstappen, independientemente de lo que cada uno piense que se hizo bien ese día. Lo único que ha cambiado es que Michael Masi ya no es director de carrera, lo que sigue dejando interrogantes en torno a sus decisiones.