El Gran Premio de Las Vegas se desmarca del calendario habitual de la Fórmula 1 y del típico formato de viernes a domingo, esta carrera se disputa de jueves a sábado, con el evento principal el sábado por la noche.

La razón de este cambio es la diferencia horaria, ya que Las Vegas está ocho horas por detrás del Reino Unido y nueve horas por detrás de la mayor parte de Europa central. Si la carrera se mantuviera el domingo por la noche, se emitiría el lunes por la mañana temprano en Europa, cuando la mayoría de la gente está ocupada con el trabajo.  

Al trasladar la carrera al sábado por la noche, la F1 facilita que los aficionados europeos puedan verla. Una carrera nocturna en Las Vegas significa que se emite el domingo por la mañana en Europa, que es un horario mucho más conveniente.

La celebración de la carrera a primera hora del día también podría funcionar, pero Las Vegas siempre se planeó como una carrera nocturna. El famoso Strip de la ciudad, iluminado por la noche, es parte del espectáculo, y correr durante el día no tendría el mismo impacto.

La decisión refleja una estrategia más amplia de la F1 para equilibrar su creciente audiencia estadounidense con su tradicionalmente fuerte base de aficionados europeos, ya que aunque el deporte está ganando popularidad en EE.UU., Europa sigue siendo su mayor mercado.

Por lo tanto, una carrera el sábado por la noche en Las Vegas es un buen compromiso, ya que permite a los aficionados de ambas regiones sintonizar sin mayores problemas.

No es la primera vez que se ajusta el calendario de la F1. A principios de este año, las carreras en Bahrein y Arabia Saudí se trasladaron para adaptarse al Ramadán. Sin embargo, para Las Vegas, el cambio de horario tiene que ver con hacer de la carrera un espectáculo global y, al mismo tiempo, mantener contentos a los aficionados de todas las zonas horarias.